Contar con un cuidador/a en casa plantea a la familia aspectos como la disponibilidad, la flexibilidad y la capacitación. En ocasiones se hace muy difícil encontrar la persona idónea que la familia necesita para atender a su mayor con todas las garantías.

Muchas familias se plantean la opción de contratar cuidadores en casa cuando ya no es posible atender adecuadamente a sus mayores.

En muchas ocasiones, la familia ha podido cuidar de su mayor en los momentos puntuales que hacía falta, ya que todavía podía valerse por sí mismo en casi todas las facetas de la vida diaria. Podía moverse sin dificultad, asearse, pasear, cocinar, realizar las tareas del hogar, etc.

Quizá entonces la familia le ayudaba en tareas como hacer la compra o una limpieza más profunda en la casa, o en tareas administrativas o algo más complicadas…

Pero llega el momento en que las tareas en las que necesita ayuda son cada vez más y la familia comienza a ser consciente de la falta de tiempo para dar cobertura a su familiar mayor.

Es entonces cuando se empieza a considerar pedir ayuda, apoyarse en otras personas que puedan atender a su mayor durante determinadas horas al día, o por la noche, o quizá puntualmente para realizar algunas de las tareas a las que ya no se llega…

Y es en este punto cuando la familia plantea varias opciones. Cuando se trata de cubrir una franja horaria o unas tareas determinadas, la solución de reservar plaza en una residencia no parece la adecuada. Además, pensemos en que nuestro mayor, seguramente, quiere continuar viviendo en su hogar.

¿Qué opciones tenemos cuando necesitamos cuidadores en casa?

 

Algunas familias optan por preguntar a sus vecinos y conocidos si conocen a alguien de confianza para atender a su familiar, para realizar tareas como limpiar y cocinar, o para bañarlo y ocuparse de su medicación…

No suele ser fácil encontrar a una persona que disponga del tiempo en el horario que necesitamos y que nos encaje en todos los sentidos. Pero suele ser una solución aceptable a primera vista, aunque pueden surgir algunos problemas.

Realizar un contrato por horas si tenemos muy clara la necesidad puede solucionar esa falta de tiempo de la familia, pero en la mayoría de ocasiones, las necesidades “cambian de horario” o pueden necesitarse más o menos horas según las circunstancias.

Además, esa persona de confianza puede fallarnos en cualquier momento y nos quedamos desamparados hasta que encontremos sustituto/a. ¿Qué hacemos mientras tanto?

El problema es mucho más complicado cuando nuestro mayor tiene un grado de dependencia mayor. Cuando necesita cuidados que requieren conocimientos, cuando necesita un cuidador todo el día porque no puede realizar casi ninguna tarea por si solo y esa persona ha de tener capacidad, formación y vocación para cuidarle y atenderle de forma profesional y cariñosa.

La familia necesita confiar en que su mayor está en las mejores manos, que la persona que cuida de él/ella tiene conocimientos y es responsable de atenderle en todo lo que necesita. Controlar su dieta, su medicación, sus necesidades básicas y de higiene diaria, sus actividades sociales o de actividad física adecuada. Que además, pueda ocuparse de las tareas del hogar, que pueda cocinar según pautas concretas, que tenga la disponibilidad que necesitamos…

Garantías con las que hay que contar

Son muchas cosas las que tenemos que tener en cuenta, ¿verdad?

En Prefiero en Casa pensamos en cada una de esas cosas. Siempre nos ponemos en vuestra situación y, sobre todo, en la de vuestro mayor.

  • Porque siempre empezamos a ayudaros realizando un estudio de vuestras necesidades, una valoración socio sanitaria realizada por expertos, quienes elaboran un informe. En este, se recogen todos los aspectos a considerar y se analizan las necesidades de nuestro mayor y de la familia.
  • Con ello, se procede a seleccionar a la persona que cumpla con los requisitos necesarios, a través de un proceso de selección riguroso. En Prefiero en Casa trabajamos siempre con los mejores perfiles.
  • Pensamos que es muy importante que exista conexión personal para que la relación paciente-cuidador/a sea óptima, por lo que en Prefiero en Casa, la familia toma parte activa en la selección del cuidador/a, siendo vosotros los que toméis la decisión final en su elección.

 

  • Nosotros nos ocupamos de todo. Olvídate de los procedimientos administrativos, de los papeleos y formularios, porque lo hacemos por ti, con la confianza y garantía de estar perfectamente realizados y con todo en regla.

 

  • Además, no tendrás que preocuparte por las sustituciones en caso de enfermedad o vacaciones. Siempre tendrás cobertura porque nos ocupamos de sustituir al cuidador/a cuando sea necesario.

 

  • Los cuidadores en casa de nuestro equipo son los mejores profesionales que vas a encontrar, son nuestro mejor activo y por lo que nos diferenciamos. No solo están capacitados y formados para atender las necesidades de vuestro mayor, sino que también lo están para realizar muchos otros servicios en las tareas del hogar.

 

  • Decidirte por nuestros cuidadores en casa es tomar una decisión pensando en las necesidades reales, presentes y futuras, porque Prefiero en Casa te da respuesta en todas las circunstancias. Somos completamente flexibles en horarios, servicios y soluciones.

Y cuentas con la garantía, servicio, atención y profesionalidad que necesitas en todo momento.

 

Habla con nosotros y te ampliamos todos los detalles que necesites conocer.